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ALIANZA FRANCESA de JUNÍN


CONMEMORACIÓN DEL 14 de JULIO
FIESTA NACIONAL DE FRANCIA


El lunes 14 de julio se conmemora el 219º Aniversario de “La Toma de la Bastilla”, fecha que simboliza el largo proceso de la Revolución Francesa.

Si bien este día es la Fiesta Nacional de Francia, en todo el mundo se recuerda esta fecha ya que la gesta del pueblo francés modificó definitivamente el ordenamiento político, jurídico, económico y social de todas las Naciones y dio así comienzo a la era actual, la era contemporánea.

En el siglo XVIII el mundo estaba organizado -desde hacía mucho tiempo- sobre las premisas que establecía lo que se conoce como “el Antiguo Régimen”. El mismo suponía que hay una casta superior que merece vivir gozando de todos los privilegios y una casta social inferior que nace y vive para sostener con su esfuerzo y trabajo al grupo de los privilegiados. En cada país, hay un rey que gobierna y decide sobre todas las cuestiones, incluso sobre el derecho a vivir o no de los demás. La decisión sobre quién dirige los destinos del país, quiénes conforman la “élite” de los privilegiados y quiénes son los que no tienen ningún derecho y deben obediencia a los poderosos, está predeterminada por “la cuna”: se nace en un estrato social y se muere en él. Bajo estas ideas vivía el mundo antes de la Revolución Francesa.

En Francia, el rey era Luis XVI y era el rey más poderoso y más absolutista de Europa.

Los “privilegiados” poseían toda la tierra y no pagaban ningún impuesto. Vivían en el esplendor de la Corte y sólo producían mucho gasto.

La gran mayoría de la población francesa vivía de manera muy diferente: trabajaban de sol a sol (en el campo o en la ciudad, eran agricultores, artesanos, comerciantes, artistas) pero sobre ellos pesaba una carga impositiva tan grande que nunca les alcanzaba ni siquiera para comer.



Pero en el siglo XVIII se había desarrollado en Europa y en América el pensamiento de la “Ilustración”, por lo que este siglo se conoce también como el “Siglo de las Luces”. Los escritores y filósofos de entonces estaban convencidos de que, después de muchos años de ignorancia, se estaba llegando a un nuevo período iluminado por la razón, la ciencia y, fundamentalmente, el respeto a la Humanidad. Estos “iluminados” comprendían, proclamaban y difundían que al Hombre le ha sido otorgado el don de pensar y, por ende, puede discernir y descubrir mejores condiciones de vida en la Tierra. Por eso, insistían en que para que el mundo fuera mejor y lograra progresar, había que conseguir que el ser humano recibiera Educación.



En Francia, el poder y la soberbia de los monarcas y su lujosa Corte propiciaban la cultura y las ideas de los “iluminados” se propagaron rápidamente en el pueblo francés.



Muchos eran los pensadores ilustrados franceses: Montesquieu, Diderot, Voltaire y, muy especialmente, Jean-Jacques Rousseau quien escribió obras fundamentales sobre la convivencia de los hombres basándose en su fe en la libertad, la igualdad y la educación.



Tanta fue la importancia que las ideas de la Ilustración tuvieron en Francia, que el pueblo de París, harto de la desigualdad social que les negaba el derecho a vivir con dignidad, sintiéndose hambriento y a pesar de estar desarmado, tuvo el coraje de tomar la Bastilla -fortaleza que funcionaba como prisión y arsenal y representaba el poder absoluto del rey- e imponer su voluntad al poderoso rey.

El 14 de julio recuerda aquella gesta heroica del pueblo parisino, pero la Revolución Francesa fue un largo proceso que duró 10 años.



La obra fue inmensa.

Esa Revolución -la única hecha por el pueblo y para beneficio de todo el pueblo, sin líderes que pretendieran encaramarse en el poder- legó al mundo conceptos que hoy rigen universalmente: el sistema métrico decimal, la redacción de un Código para inscripción y ordenamiento de todas las leyes, el derecho a justicia igual para todos los habitantes de un país cualquiera sea su condición social o de nacimiento, la educación laica y la enseñanza primaria obligatoria y gratuita, la educación superior especializada, el derecho de todos al progreso económico y al bienestar sin estar condicionado a circunstancias de nacimiento, etc.

Pero el legado mayor que la Revolución Francesa hizo al mundo, fue la “Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano”, proponiendo el modelo de gobierno republicano, reconociendo que son los pueblos los soberanos y proclamando el lema fundamental de la Revolución: “Libertad, Igualdad y Fraternidad”, tres palabras inmensas que guían desde entonces a Francia.

Por ello, el 14 de Julio es el Día Nacional de Francia pero también, y en todo el mundo, es la Fiesta de la Libertad y de la Soberanía popular.



Como cada año, en la Alianza Francesa de Junín, se conmemorará esta fecha tan cara a la Humanidad toda.

El acto está programado para las 20h30 en la Sede de la Institución.