.............................una ventana de Junín abierta al mundo
Mi tía Berta tiene un piano de cola. De boca tiene una trompeta.
Le gusta la música. A mi tío (que mide un metro cuarenta) también.
A veces, cuando ella toca el bajo, él la viola, Y arman unos conciertos desconcertantes. Sobre todo para el vecino del primero V. que se despierta sobresaltado y permanece en vigilias confusas (y semifusas).
Hasta que un día, el del primero V. no aguanta más. Así que va: ¿¡No va que, lo primero que ve es el piano de mi tía!? Primero se ve que quedó impresionado, y después en un arrebato empezó a tocarlo como un poseso. Los trompetazos de mi tía se oyeron desde la terraza y alertaron a mi tío el bajo, que bajó y lo primero que pensó fue ¡la viola! Y allá fue. Cuando el del primero V. ve que el bajo desenfunda el instrumento, se acuerda de un acorde de toccata y fuga (de Bach).
Pensó en fugarse. Pero parece que acordaron, porque se quedó.
Ahora, con la pareja del segundo C. armaron un quinteto de cámara. Según se dice, él es gomero. Capaz que son habladurías, pero ella –que prefiere la flauta dulce- se lo toma muy a pecho; dice que puede ser un Edipo mal curado.
Creo que hasta la sinfónica no paran. Están en tratativas con la solterona de arriba -vive de una pensión- que toca el arpa. Pero cuando la invitaron se cayó redonda, se puso blanca y se las vieron negras. Mi tía después de un silencio dijo que la solterona estaba fingiendo -Esta del arpa es una arpía- trompeteó.
Ahora pusieron un aviso en el Clarín “Se requiere intérprete de órgano con instrumento afinado”
Se están organizando.
iglesiasguille@gmail.com
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